sábado, 18 de febrero de 2017

INDIA 2013

Con la excusa de formalizar nuestra situación como pareja ante las autoridades, tuvimos la oportunidad de organizar un viaje a la tan deseada y para nosotros lejana India.

Hace unos días se nos ocurrió revelar alguna de las fotos más señaladas, que queremos compartir en este blog testimonial de nuestras pequeñas aventuras.

“Como todas las drogas, viajar requiere un aumento constante de las dosis” John Dos Passos.
























jueves, 25 de febrero de 2016

PEQUEÑOS TESOROS

"Pequeños tesoros son aquellos en los que pone: Aquí estoy
Más considerables son aquellos en los que pone: Te acuerdas
Pero los tesoros más bellos son aquellos en los que pondrá: Yo estuve allí"

Durante este pequeño viaje por 7 países en 8 meses se ha conformado no solo de recuerdos y vivencias de inconmensurables paisajes. Del disfrute de una naturaleza infinita, de la playa a la montaña, cientos de caminatas que nos acercaban a lugares únicos e irrepetibles, ya fueran cascadas, calas, playas, barrancos, picos, cerros, montañas, valles, vestigios de otras culturas e historia, islas, ciudades, calles, callejuelas, pueblos, parques naturales, etc.

Los cientos de amaneceres, atardeceres, estrellas, lunas, entender que acá no se tiene como referencia la estrella polar, si no la cruz del sur, aunque sigamos sin encontrarla; cielos inmensos, nubes, todo tipo de fenómeno metereologico cambiante en el mismo día, ya sea un sol o frío de justicia, lluvias torrenciales, selváticas, tropicales, nieve, granizo; las distintas estaciones, inexistentes en algunos sitios, con un verano o primavera continuos, u otros donde nos aproximamos al otoño e invierno, para volver de nuevo al calor austral de justicia, con una capa de ozono debilitada que hace necesario estar siempre protegidos....

La fauna y la flora tan variada y exuberante. Helechos milenarios, palmeras de todo tipo, vegetación selvática, flores de todos los colores, formas y tamaños, árboles gigantes a los que poder trepar como hominidos, del caucho, y alguno que parece caminar con cierta movilidad, nenúfares gigantes, plantas trepadoras por doquier, compitiendo siempre por una franja de sol y alcanzar la mayor altura,; troncos con espinas, creciendo con sus ramajes a lo alto y ancho; bosques de lengas, arrayanes, coiques, majestuosas araucarias... Todo tipo de frutos moras, frutillas, cerezas, arándanos, grosella, cocos, sandias, mangos, bananas, palta, papaya, guayaba, uvas....
Fauna como delfines, delfines rosados de río, caimanes, monos, perezosos, boas, reptiles, mariposas, jaguar, tapiz, carpincho, capivaras, armadillos, llamas, vicuñas, alpacas, peces de todos los tipos y colores, de río y mar; pájaros tucanes, loros, papagayos, carpinteros, colibríes, águilas, búhos, lechuzas, pechopintados, gaviotas, cormoranes, garzas, pelicanos, flamencos blancos, rosados, bolivianos y chilenos, pingüinos. También leones y lobos marinos, toninas, ballenas, tortugas de mar, cangrejos, rayas... Escarabajos y por supuesto todo tipo de mosquitos: normales, borrachudos, zancudos...

De relación y amistad con las gentes y amigos de todos los lugares. Del aprender otras formas de querer y darse sin esperar nada a cambio, de confiar en las personas y abrirse siempre.

También nos han acompañado cientos de kilómetros y cientos de medios de transporte, ya se en ónibus, colectivo, movilidad, micros, trufis, remis, camiones, pickUps, camionetas, coches particulares, tren, avión; practicando garona o el dedo...

Con nuestras cuatro pertenencias sobre los hombros, y que hemos sabido reducir, dejando u olvidando en el camino, todo aquello que fuera un peso innecesario, desde el calzado desgastado por el uso, la ropa interior que desapareciera por causas inexplicables, el abandono de todo abrigo con la llegada de climas más cálidos...

Realizando siempre un alto en el camino en el eventual refugio que nos albergara por unos días, ya fuera el hostel, la posada o residencia de turno, la casa de nuestros ángeles protectores de couchsurfing, o bien que nos abrieron sus puertas sin casi conocernos y que ha hecho aumentar nuestro círculo de amistades, o incluso últimamente la carpita o tienda de campaña que nos agenciamos con el buen tiempo. Esto implica, las cientos de camas y colchones, sofás, colchonetas, jardines, sacos de dormir, mantas y esterillas....

Nuestra relación con las comidas, aunque seamos un tanto especiales y poco amantes de lo sibarita y restaurantes, con los salgados y pasteles de queijo, la comida a quilo, sopas de milho, de maíz o porotos, empanadas de patata con queso, salteñas, humitas y humintas, algún que otro pescado, cebiche, comidas en los mercados, puestos callejeros, pizzas de todo tipo, pero ninguna tan insuperable como la capitalina bonairense... La fainá, y el dulce de leche, chocolates varios, helados, frutas y verduras. Los asados, especialmente en Uruguay y Argentina, coloreadas con pimientos con queso y huevo, ensaladas varias, las recetas vegetarianas que nos llevamos y unas cuantas tortillas españolas que cocinamos como intercambio y agradecimiento cultural.

Coleccionando sellos de entrada y salida en nuestros pasaportes, de nuestra zigzagueante ruta, que ha vuelto loco a más de una aduana, con periodos de estancia de tres meses, o prorrogados por algunos días de más. O con sellos de grandes hitos como Machupichu y torres del Paine.

Todos ellos imposibles de sintetizar en estas frases, pero siempre presentes en nuestro maravilloso viaje, al que sin duda alguna revisitaremos con la memoria y el atesoramiento de mágicos momentos.

ARGENTINA y vuelta a empezar

miércoles, 24 de febrero de 2016

URUGUAY, UN LINDO PAISITO

URUGUAY UN LINDO PAISITO

Estando en Brasil ya oímos campanas, y se nos caía otro mito, Pepe Mujica no era tan buen gobernante como creíamos. sin embargo la caída de expectativas con el tiempo se fue matizando, al ir adquiriendo nuestro propio punto de vista.

Encontramos en este pequeño país muchas similitudes con la españa de los años 80, donde el socialismo procuraba construir un estado de bienestar que nunca disfrutamos, a imagen y semejanza de los países europeos del norte. Aunque con ciertos matices, que lo hacen singular, como por ejemplo la Educación gratuita desde los 3 años hasta la universidad incluida, y que lleva siendo así desde hace un centenar de años, sobreviviendo incluso a las intenciones de la dictadura.

Salvando las distancias son conocidas las principales medidas como la legalización de la marihuana y el matrimonio homosexual. Aunque también hay que decir que el gobierno esta sometido a unas Cortes con mayor poder que el nuestro, limitando mucho la labor del ejecutivo. Es así que la imagen que se tiene de Pepe, es la de un filósofo, que se ha rodeado de personas algunas de ellas bastante incapaces, y donde tal vez los anhelos y lucha de libertad originales del conglomerado Frente Amplio se han ido suavizando, ya sea por lo heterogéneo del Frente o por la propia ostentación del poder. Uno de los debates más encendidos, es la especie de ley de memoria que evita juzgar a los militares, por su participación en la dictadura y sus actividades de persecución de la disidencia y grupos democráticos, así como la práctica de la tortura. De las que fueron víctimas principales los Tupamaros, como el actual ministro de defensa, así como Mugíca. 

El frente Amplio es una suma de partidos de izquierda, en los que están incluidos desde socialistas, comunistas, Tupamaros (como es el caso de Mugíca), y otros tantos. Que consiguieron gobernar hará casi una década, gracias a la movilización del voto en el extranjero, que ansiaba un cambio de los corruptos y conservadores gobiernos de los blancos y los colorados. Su gobierno ha logrado grandes avances, como elevar el salario mínimo, la nacionalización de la electricidad, el petróleo, cierta industrialización, ayudas al campo.... Consiguiendo un primer efecto de ilusión, haciendo que regresarán todos los emigrantes uruguayos dispersos por todo el mundo. Sin embargo, esta ilusión inicial poco a poco se ha ido transformado en amarga decepción al comprobar el aumento de los precios y el nivel de vida, que hacen muy difícil llegar a fin de mes. También existen grandes quejas por el funcionamiento de las empresas públicas, como la de telefonía y la luz, al dar unos servicios lentos y burocratización, aunque por otro lado se defienden frente a empresas privadas que dan los mismos servicios, y tal vez no se valore el coste laboral que se produciría al primar tan solo el beneficio y la rentabilidad económica. Por otro lado muchos uruguayos se han sorprendido al saber que en nuestro país no existe banca pública, como si ocurre allí, aunque practican a nuestro entender una política económica muy peligrosa, al igual que en gran parte de Sudamérica, como es el fácil acceso a préstamos y pagos aplazados, provocando una economía de consumo que obliga continuamente a endeudar a su población.

Nuestra experiencia con la salud pública ha sido un tanto marciana, por el referido incidente de Raquel y el grano en la ceja, que pudo ser y menos mal que no fue una mosca berro. Por lo pronto, no hubo ningún impedimento para la atención medica a un extranjero, aunque existen ciertos convenios entre la salud pública y privada, en los de la descongestion de la pública, lo que ya hecho según cuentan, bajar mucho la calidad de ambas. Pero si que denotamos ciertas carencias y falta de inversión, que entendemos procurarán solventar con el tiempo.

Es el carácter del uruguayo, muy afable y sencillo, lo que te hace sentirte muy bien. Siempre hospitalarios, tienen ese sentimiento de país chiquito que no se podrá equiparar nunca a otros, con cierto complejo, que evita cualquier delirio de grandeza. Por supuesto también fueron marcados por una atroz dictadura, que provoco la emigración hacia países vecinos, donde a muchos llego por alcanzarle las dictaduras del país que les acogió, ya sea Argentina o Chile.
Tienen también una marcada preferencia por la naturaleza, el campo y la ganadería, cual gauchos y una de las actividades que gustan de practicar, al igual que sus vecinos argentinos, es el asado, así como la acampada en zonas verdes.
Grandes conversadores, pero no altisonantes, comparten siempre su inseparable mate, al igual que su litrona, ya sea en los paseos por los malecones y grandes avenidas, o bien al son del candombe que ensaya todos los fines de semana

jueves, 18 de febrero de 2016

RESISTENCIA

RESISTENCIA

El paso por esta población se resume en la necesidad de hacer un breve receso en nuestro trayecto hacia la costa brasileira. Siendo sinceros, el lugar en sí no ha mostrado interés alguno, salvo conocer la filosofía de la persona que nos alojó. Todo un ser desprendido, animado por ayudar en todo lo posible, a cualquier viajero que se deje caer en su casa. Llegándose a convertir en un mochilero más en su propia casa.

SALTA

SALTA

Esta ciudad ha supuesto tan solo un alto en camino y un cambio en nuestra forma de viajar, ya que hemos dejado el hábito de mostrar el pulgar, por un autobús de línea rumbo a nuestro destino final.

Así pues, un tanto cansados de la  ajetreada vida del mochilero, procurando conocer lo máximo posible, siempre a cuestas con la pesada mochila. Decidimos acortar nuestra visita al norte argentino, un tanto por la urgencia, otro tanto por el ansia del regreso, y estar próximo al entorno donde partirá nuestro avión de regreso a reencontrarnos con nuestra familia. 

La estancia final ha sido finalmente de un día y una noche, paseando por el microcentro y sus principales puntos de interés. Descartando otras etapas que nos habíamos propuesto como Córdoba y Cafayate.

Tiene la ciudad de Salta, a la que apodan la linda, cierto aire colonial, un tanto al estilo de la Serena y Trujillo, pero tal vez más grande. Con casas de escasa altura, de nos más de dos metros y cierto aire andaluz. Esta repleta también, de iglesias monumentales, las más destacadas son las de San Francisco y su Catedral, en plena plaza 9 de julio y recomendables museos, que no llamaron nuestra atención, ya que proveníamos de admirar la naturaleza próxima del norte Salteño.

A pesar de todo,no dejamos de probar una de sus principales atracciones, el teleférico que asciende por el cerro que sirve de referencia a la hora de orientarse y situar correctamente el Oriente. Desde sus lomas admiramos el verdor de la zona de Cachi, y que suelen vender en conjunto con Cafayate, los principales touroperadores de la ciudad, para disfrutar de la quebrada de Cafayate y los figuras que se aprecian en su naturaleza. 

Tras disfrutar de las vistas, descendimos por un paseo en forma de escaleras convenientemente emboscados por el verdor de la naturaleza, ya que el sol y calor  llega a ser insoportable, de manera que llegan incluso a tener por costumbre la toma de la siesta, y el cierre de negocios entre las 15h y 17h. Una vez llegado al tramo final, encontramos en la base de su loma, la estatua al libertador Gaucho general Güemes, figura a la que actualmente se esta poniendo en valor, por su participación en la independencia de la nación.

Desde allí paseamos por la avenida de San Martín, junto al extenso parque que llega contener un lago al estilo del retiro madrileño, y repleto de puestos de artesanía! venta de panchos y comida rápida, así como otras baratijas. Nuestro divagar nos llevo por distintas calles peatonales, así como la clásica visita al mercado dl lugar donde comimos, antes de subir a nuestro colectivo. Descansando la noche anterior en la plaza principal, sentados en sus bancos y disfrutando de un rico helado de dos bochas, mezclado por supuesto con dulce de leche. Otro de los paseos nos llevo por la calle de Balcarce, famosa por ser la zona de marcha, y lugar de peñas y actuaciones gauchas.

Por la noche festejamos el resultado satisfactorio del conflicto laboral de Raquel con una buena cena, en el recomendado restaurante Don José. Tomando las que posiblemente sean nuestras últimas Humitas y unos ñoquis, que tenía antojados desde nuestra estancia en Uruguay (donde suelen consumirlos a finales de mes, en recuerdo a tiempos de escasez). Regresando pronto a nuestro hostal, para hacer los preparativos de la partida.

HUMAHUACA

HUMAHUACA

Nuestra principal meta era sin duda Iruya, localidad de la que nos habían hablado muy bien, pero ante la falta de pesos en metálico teníamos que hacer una parada en el camino, allá en Tilcara. A la llegada al cruce de la ruta principal, apareció para nuestra sorpresa una patrulla policial que empezaba a cortar el tráfico en esa dirección. Nosotros al ir a pie no teníamos prohibición alguna, sin embargo no existía movilidad alguna a la que le permitieran transitar. Después de un tiempo preguntamos a los gendarmes qué ocurría y nos dieron explicaciones vagas, que si por las lluvias el río se había desbordado, que si un coche cruzado en la ruta, pero nada claro.

Interpelamos a los vehículos que venían en dirección contraria, circulando sin problema alguno, y ellos decían no haber visto nada, de hecho pensaban que la cuestión se producía en nuestro punto. Tras horas de espera con un sol de justicia, y deliberando entre nosotros que hacer, la gente se empiezó a calentar y saltarse la barrera cada uno de manera más descarada, sacando el carácter italiano macarrero que llevan dentro.

Tras varios toma y daca con los gendarmes, que si ahora nos escapamos unos, que si ahora la barrera la pongo más allá.... Conseguimos que una pareja nos acercara a la localidad de Maimara, y de allí un paisano muy majo que nos ofreció llevarnos directamente a Humahuca, y que al parecer era más grande y con más ofertas de bancos y cajeros que Tilcara. A la altura de Tilcara, pudimos observar con nuestros ojos la magnitud del problema. Aquello parecía un campo de refugiados de la cruz roja, con la gente intentando huir en lo primero que fuera posible. Y es que, resulta que tiene tanta fama Tilcara por su carnaval, que el pueblo sufrió una avalancha de Porteños, a lo que se unió una serie de tormentas que provocó desbordamientos y al parecer también desparecidos, todo ello un tanto confuso y caótico.

Al llegar a nuestro nuevo destino buscamos un camping, y tras instalarnos bajamos al centro a participar del carnaval, y una vez allí el Miqui sufrió toda una recaída en forma de golpe de calor que le dejó grogui para el resto del día. Tras una pequeña siesta en el césped, todavía este cabezota se empeñó en dar una vuelta por el pueblo, donde visitamos, entre otros el monumento a los indígenas que participaron en la independencia y una bonita vista de la ciudad, desde lontananza salpicados por una serie de imponentes cactus, con enormes brazos hacia el cielo, al puro estilo del oeste americano.

Al regreso compramos unas empanadas de queso, baratitas y muy ricas, tumbàndonos y después de otro resurgir volvimos a por más empanadas, pero esta veZ con una mejor oferta si cabe.

Tras una noche de lluvias continua, amaneció con una mañana triste y nublada, torciendo nuestros planes iniciales de visitar la Quebrada de los 14 colores. Así pues nos acercamos al pueblo y una vez allí coincidimos con una comparsa que estaba tocando, por lo que decidimos unirnos y empezó a circular un brebaje alcohólico parecido al rebujito, ofreciéndonos también hojas de coca. Y al haber sido advertidos con anterioridad de no evitar las invitaciones, por poder ofenderse, aceptamos, primero de mala gana, pero poco a poco más integrados y alegres. Siendo así como participamos del rito del chayar con la pachamama. Donde realizamos una serie de ofrendas a la madre tierra, principalmente en forma de alcohol, siendo conectados con ella y con la comparsa.

Después de toda esta aventura fuimos a comer y ver si era posible hacer la visita a la quebrada, pero las nubes impedían el disfrute de las vistas, postergandolo para el día siguiente y prácticamente abandonando la idea inicial de acudir a Iruya, por el riesgo de las lluvias. El resto del día lo pasamos paseando por el pueblo, observando como chayaban sus autos, para evitar posibles accidentes. Y por la noche uniéndonos a las distintas comparsas que desfilaban por las calles principales, con su música y diablillos.

Al día siguiente con un tiempo espléndido, luchamos por una buena oferta y acompañados por unos jóvenes porteños, viajamos en la parte trasera de una pickUp, hacia el Hornacal, famoso cerro de los catorce colores. Al llegar a contemplarlo el silencio se hizo ley, disfrutando de sus bacanas vistas, realizando una pequeña caminata por la montaña próxima, que permitía contemplarlo. Sin lugar a dudas la espera había válido la pena y nadie nos iba a quitar esta maravillosa impronta en nuestra retina.

Al regresar retomamos nuestras cosas en el camping, para hacer dedo camino a Salta, con la idea, de tal vez, visitar el Cafayate. Siendo levantados por un verdulero muy amable que terminó dejándonos a escasos 80km de nuestro destino, con un cargamento de verduras y hortalizas